Los trastornos de ansiedad son una de las enfermedades mentales más comunes y el aislamiento social puede ser una fuente importante de estrés. Hay medicamentos disponibles para tratar estos trastornos, como las benzodiazepinas; sin embargo, tienen una serie de desventajas. En un estudio reciente en ratones, el equipo del profesor Jing Liang de la Facultad de Farmacia de la USC, en Estados Unidos, descubrió que una sustancia química llamada dihidromiricetina podría tener potencial como nuevo tratamiento para los trastornos de ansiedad.
¿Qué tratamientos están disponibles para los trastornos de ansiedad?
Además del tratamiento psicológico, también existen medicamentos para tratar los trastornos de ansiedad. Se pueden recetar antidepresivos, concretamente inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina (ISRS) o inhibidores de la recaptación de serotonina y noradrenalina (IRSN). Sin embargo, estos medicamentos tienen efectos secundarios, que incluyen mareos, insomnio, dolores de cabeza, sequedad de boca y, en el caso de los ISRS, disfunción eréctil. En casos más graves de ansiedad, se pueden recetar benzodiazepinas. Desafortunadamente, las benzodiacepinas tienen algunas desventajas importantes. A menudo provocan somnolencia y hacen que el consumo de alcohol sea peligroso. Las benzodiazepinas también son adictivas y se vuelven menos efectivas con el tiempo, por lo que sólo son adecuadas para un uso a corto plazo.
Para mejorar el tratamiento de los trastornos de ansiedad, es vital que se desarrollen medicamentos más eficaces con menos efectos secundarios para uso y tratamiento a largo plazo. Afortunadamente, una nueva investigación ha sugerido que una sustancia química llamada dihidromiricetina podría estar a la altura de la tarea.
¿Qué es la dihidromiricetina?
La dihidromiricetina, o DHM, es un bioflavonoide. Los flavonoides son sustancias químicas producidas por el metabolismo de las plantas, con una gran variedad de funciones. Estas funciones incluyen proteger a las plantas del estrés, además de contribuir al olor y color de frutas y flores. Como flavonoide natural, el DHM se produce en especies de plantas únicas, incluido el árbol de pasas japonés (Hovenia dulcis) y Ampelopsis grossedentata . Ambas plantas se utilizan en remedios y tés de hierbas tradicionales del este de Asia, y se han informado muchos beneficios para la salud. Los tés elaborados con Ampelopsis grossedentata , conocidos como té de vid o moyeam, son populares en China. Se dice que ayuda con la hiperglucemia, la hiperlipidemia, los dolores de garganta y los resfriados. En China, Japón y Corea, el árbol de pasas japonés se utiliza a menudo en la medicina herbaria tradicional. Históricamente se ha utilizado como laxante y tratamiento para infecciones parasitarias. Una aplicación más reciente del uso de DHM es la contrarrestación de los efectos nocivos del abuso de alcohol, en la que el DHM se complementa como cura para la resaca con la capacidad de proteger contra enfermedades hepáticas.
" Se demostró que el tratamiento con DHM es ansiolítico, lo que significa que reduce la ansiedad. "
Lo que la investigación ha revelado sobre el DHM
La profesora Jing Liang y su equipo de la Facultad de Farmacia de la USC realizan investigaciones sobre el DHM y los resultados sugieren que podría tener muchas aplicaciones útiles en medicina. Un artículo publicado por el equipo demostró que el DHM contrarresta los efectos del alcohol. Dentro de estas investigaciones se identificó que el tratamiento de ratas con DHM redujo el consumo de alcohol y la intoxicación, así como los síntomas de abstinencia como ansiedad y riesgo de convulsiones. Otro estudio demostró que el tratamiento con DHM podría ser un medicamento eficaz para la enfermedad de Alzheimer. Se demostró que los ratones con la enfermedad tratados con DHM tenían una reducción de la pérdida de memoria, la ansiedad, el riesgo de convulsiones y los niveles de péptidos asociados con el Alzheimer. En ambos estudios, se demostró que el tratamiento con DHM era ansiolítico, lo que significa que reducía eficazmente la ansiedad.
En su estudio más reciente, los investigadores se centraron en este efecto y se propusieron probar qué tan efectivo era el tratamiento con DHM para reducir la ansiedad causada por el estrés crónico del aislamiento social. La eficacia del DHM también se comparó con la del diazepam, una benzodiazepina comúnmente recetada. Esto se hizo alojando ratones en aislamiento social durante 2 o 4 semanas, seguido de 2 semanas de tratamiento con DHM, diazepam o placebo. El comportamiento y el cerebro de estos ratones se compararon entre sí y con un grupo de control de ratones alojados en un entorno grupal.
El efecto del tratamiento con DHM sobre el comportamiento ansioso.
Se evaluó el comportamiento ansioso de los ratones en un experimento de laberinto elevado, que es un ensayo de examen típico para los niveles de ansiedad. Se trata de una plataforma en forma de cruz con dos brazos encerrados entre paredes y dos abiertos sin paredes. Los ratones fueron colocados en el laberinto para observar el comportamiento ansioso determinado por una aversión a los brazos abiertos. Los ratones con niveles más altos de ansiedad pasaron más tiempo en los brazos cerrados, y los ratones menos ansiosos pasaron más tiempo en los brazos abiertos.
Los ratones alojados en aislamiento sin tratamiento pasaron mucho menos tiempo en los brazos abiertos que sus homólogos alojados en grupo, lo que indica niveles más altos de ansiedad. Sin embargo, los ratones aislados a los que se les administró DHM durante 2 semanas mostraron mejoras significativas, y los ratones aislados de 2 semanas mostraron resultados similares a los ratones alojados en grupo. La DHM tuvo un efecto un poco menor en ratones aislados durante 4 semanas, quizás debido a que el aislamiento prolongado indujo una ansiedad más severa. Sin embargo, esto fue aún más significativo que el efecto del tratamiento con diazepam. Estos hallazgos indican que la DHM ayuda a reducir el comportamiento ansioso, más que las benzodiazepinas.
El comportamiento ansioso también se evaluó mediante una prueba de campo abierto. Esta evaluación también evalúa la aversión ansiosa a los espacios abiertos, los niveles de fuerza física y el comportamiento exploratorio. Se midieron las distancias recorridas por los ratones y se descubrió que los ratones alojados en aislamiento viajaban significativamente menos que sus homólogos alojados en grupo. Los ratones aislados tratados con DHM viajaron mucho más que los ratones sin tratamiento.
Este hallazgo indica que el tratamiento con DHM restablece la actividad exploratoria y motora que de otro modo se reduce con un comportamiento de alta ansiedad. El tratamiento con diazepam en realidad redujo la distancia recorrida por los ratones aislados. En la prueba de campo abierto, cuando los ratones pasan más tiempo en las esquinas y están congelados en su lugar, junto con la cola levantada, estas observaciones indican niveles más altos de ansiedad en estos modelos animales. Todos estos comportamientos similares a la ansiedad aumentaron en ratones aislados no tratados en comparación con los ratones alojados en grupo. Es importante destacar que el grupo aislado tratado con DHM mostró una reducción en estos comportamientos. Para complementar esta evidencia, también se observó que la ansiedad inducida por el aislamiento también causaba una reducción en el tiempo que los ratones pasaban criando a otros ratones y el tiempo que pasaban en el centro del campo abierto. Se descubrió que el tratamiento con DHM revertía este comportamiento, ya que los ratones aislados alimentados con DHM mostraron un aumento en estos comportamientos en comparación con los ratones no tratados. En todas estas pruebas, el tratamiento con diazepam no pareció ayudar a las conductas ansiosas medidas.
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